Las aportaciones económicas en emergencia son mucho más prácticas y coherentes con nuestros valores.
- Los bienes donados en especie en España pueden no ser adecuados a las necesidades de la población y a la situación humanitaria y logística en el terreno, que puede variar rápidamente en situaciones de crisis y debe ser evaluada constantemente por los equipos de respuesta humanitaria en el terreno.
- Los bienes donados individualmente pueden suponer costes y dificultades administrativas logísticas adicionales – necesidad de embalaje, trámites aduaneros suplementarios, fecha caducidad en alimentos y medicamentos, etc. – para las ONG y administraciones públicas que los gestionan, resultando más práctico y efectivo el uso de kits de respuesta humanitarios estandarizados, en caso de que los productos necesitados no estén disponibles localmente o en países vecinos.
- En una situación de desastre, todas las personas y las comunidades poseen capacidades de respuesta a pesar de su vulnerabilidad. De hecho, la población local es la que siempre ofrece una respuesta inmediata que es la que garantiza que muchas vidas sean salvadas. Por ello, las ONG y la administración intentarán fortalecer esos medios y capacidades empleando a personal local, comprando materiales sobre el terreno que activen la economía y empleo locales y negociando con empresas nacionales.
- El personal internacional que es enviado por ONG y agencias humanitarias a una respuesta ante un desastre natural o conflicto armado sigue un proceso de selección riguroso, basado en la experiencia y formación. No sólo se requiere conocimiento técnico sino, entre otros, también del ámbito de la cooperación y del contexto específico en el que se produce la emergencia.