Hasta la fecha no hay evidencias creíbles de que cualquier financiación de la UE o de un Estado europeo se haya canalizado a grupos armados palestinos. Durante años, las organizaciones de la sociedad civil palestina han sido acusadas de tener vínculos con el terrorismo en un esfuerzo por socavar su trabajo y su legitimidad. Han sido objeto de un alto grado de escrutinio por parte de los donantes internacionales, y la ayuda proporcionada ha sido revisada rigurosamente por los donantes de forma periódica.
Estamos profundamente preocupadas de que estas decisiones representen una interferencia indebida en el trabajo de las organizaciones de la sociedad civil que promueven y protegen los derechos humanos para todas las personas en Israel y los territorios Palestinos ocupados. Exigir a las organizaciones que se adhieran a ciertas líneas políticas que representan las posiciones políticas de los estados donantes infringe y restringe su libertad de expresión.
Estas decisiones también socavan gravemente los compromisos de los Estados con las personas defensoras de los derechos humanos según las directrices suizas y de la UE sobre personas defensoras de los derechos humanos, y los compromisos generales con los derechos humanos y la libertad de asociación. La libertad de asociación garantiza que toda persona pueda organizarse, conformar y participar en grupos, ya sea formal o informalmente.
La decisión de suspender y revisar la financiación, especialmente en este momento, solo contribuirá aún más a una situación de derechos humanos ya de por sí terrible en Israel y los territorios Palestinos ocupados. Las organizaciones y personas defensoras de los derechos humanos en Israel y los territorios Palestinos ocupados son actores clave a la hora de documentar violaciones de derechos humanos en toda la región, incidiendo por la rendición de cuentas por esas violaciones y buscando una reparación efectiva para las víctimas y sobrevivientes.
Impedirles que continúen con su trabajo sólo socavaría las esperanzas de un futuro en el que todas las personas puedan disfrutar de los mismos derechos en Israel y en los territorios Palestinos ocupados.