El impacto de la pandemia, la reactivación en noviembre de 2021 del conflicto militar y la ruptura de relaciones diplomáticas de Argelia con Marruecos. La población saharaui vivía ya un empeoramiento sustancial de su vida; una situación que se tambalea aún más tras la decisión del Gobierno de España de reconocer que Marruecos convierta al Sahara en una de sus autonomías. Un giro de timón que pone en jaque a la población saharaui.
Médicos del Mundo, acaba de difundir un comunicado donde se rechaza el paso dado por Sánchez. “El Gobierno de España no puede tomar decisiones ignorando el principio de representación legítima al que este pueblo tiene derecho, representado en el Frente Polisario, y constituido -y reconocido por cerca de 90 países- como la República Árabe Saharaui Democrática”.
La advertencia y la preocupación ante las consecuencias directas de esta decisión del Gobierno español es clara. La ayuda humanitaria puede encontrarse con importantes dificultades.
La advertencia y la preocupación ante las consecuencias directas de esta decisión del Gobierno español es clara. La ayuda humanitaria puede encontrarse con importantes dificultades, ya que “el acceso de personal humanitario y suministros se han superado en la constante colaboración con las autoridades saharauis”. Si la situación para más de 176.000 personas que viven en los campamentos de personas refugiadas de Tinduf (Argelia) ya era precaria, esta decisión tendrá repercusiones dramáticas. “Se trata de generaciones que han nacido y crecido en los campamentos esperando a que la comunidad internacional y las partes implicadas den una respuesta digna y a la altura de sus legítimas aspiraciones de autodeterminación”.
Organizaciones presentes en la zona como Médicos del Mundo, Mundubat y CERAI hacen un análisis de la situación actual de los campos de refugiados saharauis; explican los efectos directos que ha tenido la pandemia en la ayuda humanitaria en la zona. Un impacto que no solo se ha sentido en la disminución de insumos recibidos sino principalmente, en la población saharaui que se siente “nuevamente abandonada ante un confinamiento que para ellos y ellas no es nuevo, porque llevan décadas padeciéndolo”.
Pregunta. ¿Cuál es la situación actual que se vive en los campamentos de personas refugiadas saharauis (CRS)?
Mundubat. La población refugiada saharaui vive un momento especialmente delicado a causa de dos motivos principales. Por un lado, la reanudación de la guerra entre Marruecos y el Frente Polisario ha generado una nueva situación de tensión en los campamentos, pero a su vez, un pequeño resquicio de esperanza para un pueblo que lleva más de 45 años sobreviviendo al exilio y al olvido, y que ahora siente que puede haber un final para su larga espera. Igualmente, esta situación ha provocado desplazamientos internos de la población saharaui que se ubicaba en los territorios liberados, hacia los campamentos, en busca de refugio.
Por otro lado, la crisis mundial provocada por la Covid-19, ha afectado de manera latente en los campamentos saharauis; a pesar de que la incidencia del virus no ha sido tan elevada como en otros lugares, su impacto ha provocado graves consecuencias, especialmente las derivadas del cierre de fronteras (Argelia continúa limitando el espacio aéreo) que conlleva directamente a un sentimiento de “abandono” por parte de la población local y a un incremento insostenible de la inflación.
CERAI. La situación a finales del mes de enero de 2022 es de una crisis alimentaria, sanitaria y social agravada por la situación mundial de pandemia que se suma a que en los últimos años la ayuda humanitaria cada año es menor (en cantidad y calidad nutricional). También el coste de la vida, el precio de los alimentos y medicinas ha aumentado considerablemente y hay menos trabajo debido a que se ha visto afectado negativamente el comercio entre los campamentos y otras zonas (Territorios Liberados, Mauritania e incluso con el norte de Argelia). Esto ha supuesto que bastantes comerciantes hayan tenido que abandonar su actividad o que se viera muy afectada por una reducción de la movilidad (también afectada por la guerra). Por tanto, lo que está en una situación más precaria en comparación con periodos anteriores, es la falta de ayuda alimentaria directa y la reducción de la canasta básica de alimentos.
Médicos del Mundo. La situación actual respecto al derecho a la salud en el contexto del refugio prolongado, agravado por la reactivación del conflicto y los efectos directos de la pandemia, requiere seguir reforzando los programas prioritarios desarrollados por las autoridades sanitarias (salud reproductiva, infantil y enfermedades crónicas), para que se garantice la continuidad de la atención. Además, es necesario apoyar en el acceso a la medicación y material médico, que debido a la crisis sanitaria no se encuentran fácilmente en stock; en la atención directa a través de las comisiones médicas, que quedaron paralizadas tras la emergencia y que comienzan paulatinamente a reactivarse; en el fortalecimiento de las estrategias de prevención, vigilancia y atención frente a la Covid 19 (asegurando que se aborde el impacto de género) y en la promoción del liderazgo local de las mujeres saharauis en la respuesta.
La población saharaui que se siente “nuevamente abandonada ante un confinamiento que para ellos y ellas no es nuevo, porque llevan décadas padeciéndolo”.
Mundubat. Argelia, país donde se ubican los campamentos saharauis, mantuvo sus fronteras totalmente cerradas hasta el mes de junio de 2021. Fue entonces cuando realizó una apertura parcial que se mantiene hasta la fecha con una importante restricción de vuelos y de barcos. A partir de marzo de 2020 se inició la repatriación del personal internacional de ONG y no fue hasta casi año y medio después cuando se pudo comenzar a retornar. Esta situación ha alterado enormemente a la ejecución de los proyectos; hemos tenido que realizar algunas modificaciones para garantizar la consecución de objetivos y resultados. Todo ello se ha podido llevar a cabo gracias al gran esfuerzo del personal local saharaui.
P. La pandemia ha provocado que muchos países cierren sus fronteras y este cierre también ha afectado a la ayuda humanitaria ¿Cómo han podido trabajar las organizaciones? ¿Cuáles han sido los efectos sobre los campo de personas refugiadas saharauis?
Mundubat. Los envíos de caravanas de ayuda humanitaria que eran frecuentes en años anteriores, promovidas principalmente a través del movimiento solidario en todo el Estado español, se paralizaron. Esta situación ha afectado a la población saharaui no sólo en cuanto a la diminución de insumos recibidos, sino principalmente, al impacto emocional que supone el sentirse nuevamente abandonada ante un confinamiento que para ellos y ellas no es nuevo, porque llevan décadas padeciéndolo.
(Existe) una preocupación general de la población que busca no ser olvidada y que sabe que gran parte de la ayuda humanitaria se consigue mediante la visibilidad y conocimiento de la situación en el exterior.
CERAI. En el caso de proyectos de cooperación al desarrollo, hay actividades que se han seguido realizando. Otras se han paralizado o pospuesto porque dependían de materiales o personal procedente de otros países. En algunos casos se han tenido que transformar en actividades alternativas, que en la mayoría de los casos tenía menos impacto en comparación a lo inicialmente planteado. También se han tenido que adaptar dinámicas de trabajo presencial a otras menos presenciales o totalmente a distancia.
En el caso de los CRS la presencia de muy poco personal expatriado o en menor cantidad ha reducido la visibilidad de la situación y del cambio de condiciones debido a la pandemia y a la guerra. Esto provoca en el caso de los CRS, una preocupación general de la población que busca no ser olvidada porque sabe que gran parte de la ayuda humanitaria se consigue mediante la visibilidad y conocimiento de la situación en el exterior.
«Ha habido una degradación de las condiciones de vida, no se ha podido evitar el que haya empeorado la situación en cuanto al acceso a los alimentos necesarios o la atención sanitaria».
Médicos del Mundo. La emergencia sanitaria nos obligó a una profunda consideración del contexto global y local en los CRS. Pusimos en marcho un sistema de gestión adaptativo basado en la comprensión de sus efectos y en la revisión continua de nuestras acciones. Tuvimos que ajustar nuestras actividades y replanificar los recursos asignados; tomamos en cuenta las necesidades generadas por la pandemia. Además, pusimos en marcha un sistema de gestión en remoto con nuestros socios y equipo nacional, para continuar con la gestión de los proyectos tras la salida de nuestro equipo expatriado.
P. ¿Cómo han hecho frente las personas que viven en los CRS a esta situación? ¿Qué mecanismo han impulsado?
Mundubat. Se ha impulsado la incorporación de más personal saharaui para refuerzo de los equipos locales y algunas organizaciones han incorporado a personal argelino. También se ha aumentado el uso de herramientas online que ha facilitado el contacto con las ONG durante el período de no presencialidad -a pesar de las dificultades que ello supone ya que las comunicaciones en los campamentos no siempre están disponibles por problemas de electricidad o de cobertura-.
CERAI. Ha habido una degradación de las condiciones de vida, no se ha podido evitar el que haya empeorado la situación en cuanto al acceso a los alimentos necesarios o la atención sanitaria. Se han hecho llamamientos “de urgencia” a los donantes y Argelia ha respondido en momentos puntuales con ayudas excepcionales; pero esto no ha evitado la degradación y empeoramiento progresivo de las condiciones de vida en los CRS.
Médicos del Mundo. La identificación y el establecimiento de nuevas relaciones surgidas a partir del impacto de la pandemia, tanto con el MSP como las agencias de NNUU, y otros actores humanitarios, fue un elemento esencial que fortaleció el proceso de respuesta. A nivel de movilización comunitaria, destaca el papel de algunas organizaciones de la sociedad civil dirigidas por mujeres, que trabajaron compartiendo por sus teléfonos consejos y mensajes para promover cambios de conducta saludables y prevenir la transmisión de riesgo de la Covid 19; también repartiendo kits de protección en las wilayas.
«Las intervenciones humanitarias se prolongan desde hace más de cuatro décadas, y esto ha hecho que la población saharaui se convierta en dependiente de ese apoyo».
P. ¿A día de hoy se han podido restablecer los corredores humanitarios oficiales para facilitar la llegada de cooperantes internacionales?
Mundubat. Aunque continúan las dificultades para encontrar plazas en los limitados vuelos, la entrada y salida de personal expatriado se puede realizar ya con bastante facilidad.
CERAI. Se han restablecido los corredores humanitarios o las vías habituales que utilizan los cooperantes internacionales, pero no con la misma frecuencia ni cantidad. Por lo tanto, se han restablecido de forma parcial.
Médicos del Mundo. Hay rutas que se han reabierto y otras que siguen sufriendo cancelaciones y la frecuencia de vuelos sigue siendo escasa. Esta situación impacta tanto en los costes de viaje como en la planificación de nuestro trabajo.
P. ¿Cuáles son las barreras y limitaciones con las que se encuentra la acción humanitaria en los campos de refugiados?
Mundubat. La principal barrera es que la acción humanitaria se ha consolidado como un pilar fundamental para garantizar su funcionamiento. Las intervenciones humanitarias se prolongan desde hace más de cuatro décadas, y esto ha hecho que la población saharaui se convierta en dependiente de ese apoyo. Pero al mismo tiempo que la acción humanitaria se ha convertido en un imprescindible, la financiación recibida ha ido disminuyendo, lo que ha generado un elevado nivel de vulnerabilidad entre la población que a día de hoy no puede sobrevivir únicamente con lo que recibe por esa vía.
CERAI. Las limitaciones, actualmente, son debidas a la gran restricción de movimiento que aún hay para entrar en Argelia y los requisitos que exige el país. Esto sigue haciendo que haya menor movimiento de personas y materiales humanitarios. Aunque a día de hoy, se hayan reestablecido lo “imprescindible” hay necesidades importantes que no se están pudiendo cubrir o realizar tal como se hacía antes de la pandemia.
Médicos del Mundo. En las compras internacionales hemos apreciado un impacto a la hora de importar material médico, dado que los costes derivados del transporte y los tiempos de gestión han aumentado a causa de la Covid-19.
P. Por un lado, hace unos meses Argelia rompió relaciones diplomáticas con Marruecos y, por otro lado, el año pasado el conflicto militar se ha reactivado en el Sahara Occidental. ¿Cómo afecta este contexto a la sociedad civil y en concreto en los CRS?
Médicos del Mundo. El refugio prolongado tiene un gran impacto en el bienestar psicosocial y la salud mental de las personas en campamentos, debido a la situación de exilio y aislamiento forzado, la incertidumbre política frente al futuro, el clima extremo, el perfil de enfermedades derivadas de las carencias básicas que sufren, las inequidades de género, etc. En ese sentido, la reactivación del conflicto es una experiencia que constituye una nueva amenaza que está suponiendo un sufrimiento psicológico mayor.