- Como ONGD miembro de la Coordinadora Estatal nos sumamos a la necesidad de un enfoque feminista en la cooperación internacional, en la educación para la transformación social y en las políticas públicas.
- Pedimos el cumplimiento de los compromisos asumidos por el gobierno de España con el Plan de aceleración mundial por la igualdad de género, desde un enfoque de coherencia de políticas imprescindible si realmente se quiere hacer efectiva la Agenda 2030 y la igualdad de género en todo el mundo.
- Seguimos apostando por las redes y los círculos de apoyo y sororidad existentes entre las mujeres, por el activismo y la acción colectiva, visibilizando y reconociendo las luchas y resistencias de las mujeres y organizaciones feministas por los derechos de las mujeres.
Un año más se hace necesario alzar la voz frente a las violencias machistas y los impactos que tienen en las vidas de las mujeres y niñas. La pandemia por Covid-19 ha afectado de manera desigual a mujeres y hombres, incrementando las desigualdades de género y poniendo de manifiesto la vulnerabilidad diferencial por razones de género, clase y raza.
Los confinamientos y límites a la movilidad impuestos por la necesidad de preservar la salud pública han reforzado en muchos casos la situación de aislamiento en la que se encuentran miles de mujeres que conviven con su agresor. La crisis económica provocada por la pandemia ha afectado más a las mujeres vulnerables que, en muchos casos, dependen económicamente de sus parejas, son madres monomarentales, o están ya de por sí en puestos de trabajo precarizados, con condiciones indignas, en situación irregular, en peores condiciones salariales, o directamente no remuneradas. Se han derivado recursos públicos para prevenir y erradicar las violencias de género a la lucha contra la pandemia, cuando los mensajes y llamadas a las líneas de atención de violencia se incrementaron exponencialmente en 2020. La crisis sanitaria ha puesto de manifiesto la vulnerabilidad de las vidas, la necesidad de la interdependencia, de los cuidados colectivos, y la importancia de fortalecer la salud como bien común y público, y de cuidar a quienes cuidan, con un sector sanitario y de cuidados altamente feminizado.
En los países en los que trabajamos siguen asesinando a mujeres defensoras de derechos humanos y medioambientales, la pandemia ha incrementado el abandono escolar, mayor en las niñas, las tasas de matrimonio infantil y uniones tempranas, y los duros confinamientos han dificultado el acceso de las mujeres a servicios de protección frente a la violencia, y a servicios de salud sexual y reproductiva.
En el mundo, según datos de ONU Mujeres, cada día 137 mujeres son asesinadas por miembros de su propia familia. En España en 2020, según la Delegación del gobierno contra la violencia de género, fueron asesinadas 77 mujeres y en lo que va de año hasta hoy han sido asesinadas 37. Esta es la punta más visible del iceberg de las violencias machistas y la más trágica, pero las mujeres vivimos violencias todos los días: psicológicas, físicas, sexuales, simbólicas. Violencias machistas que se cruzan con las violencias racistas, capitalistas, capacitistas, la LGTBIfobia.
- A nivel mundial, al menos el 35% de las mujeres ha experimentado violencia física o sexual (estos datos no incluyen el acoso sexual) (OMS)
- El número de llamadas telefónicas de asistencia se ha quintuplicado en algunos países como consecuencia del incremento de las tasas de violencia de pareja provocado por la pandemia de Covid-19 (ONU Mujeres)
- 15 millones de niñas adolescentes de 15 a 19 años han experimentado relaciones sexuales forzadas en todo el mundo (ONU Mujeres)
- A pesar de que en numerosos países existen garantías constitucionales en materia de igualdad de género, en el plano mundial las mujeres tienen, en promedio, solo el 75% de los derechos jurídicos de los hombres (Informe de Población de Naciones Unidas)
- Al menos 200 millones de mujeres y niñas entre 15 y 49 años han sido sometidas a la mutilación genital femenina en los 31 países donde se practica (ONU Mujeres)
Frente a esta realidad, InteRed defiende la coeducación para prevenir las violencias machistas en todos los ámbitos de la sociedad. Una educación afectivo sexual, que ponga en el centro los cuidados de las personas y del planeta, que defienda la diversidad de identidades como un valor, y que muestre tolerancia cero frente a las violencias machistas. Una educación basada en los derechos humanos, la justicia social y medioambiental, la igualdad y equidad de género, la interculturalidad crítica y la paz y solidaridad.
Recurso educativo de InteRed. Propuestas didácticas de Reflexión-Acción 25 N, haz click aquí.
Frente al auge de los discursos de odio y de los discursos negacionistas de las violencias machistas, defendemos el derecho a una educación a lo largo de toda la vida, que genere pensamiento crítico, diálogo, y que nos permita construir una sociedad más participativa y democrática.
Web Toca Igualdad, haz click aquí
Informe con Maldita.Es: Desinformación y discursos negacionistas sobre la violencia de género, el cambio climático y la COVID-19 en España. Herramientas para identificarlos y desmontarlos”, para ir al informe, haz clic aquí.
Nos sumamos a las concentraciones y movilizaciones que en todo el mundo piden la erradicación de las violencias estructurales contra las mujeres y las niñas.
Comunicado de la Coordinadora Estatal de ONGD, haz click aquí
Documental “Toca Coeducar. Toca Coeducar”. Sobre qué son las violencias machistas: Identificar, desmontar y actuar: